Cuando el P. Tomaž Mavrič CM, Superior General, visitó Corea en 2019, presentó la Campaña de las 13 Casas y alentó a la Familia Vicenciana en Corea a trabajar por su éxito. Después de su visita, el Consejo de la Familia Vicenciana de Corea invitó a las diferentes ramas a asumir este proyecto, pero debido a la pandemia del COVID 19, sus miembros no pudieron participar activamente.

En 2020, el Consejo de la Familia Vicenciana tuvo una reunión e invitó a las Hijas de la Caridad del Refugio Santa Luisa que atienden a mujeres migrantes, víctimas de violencia doméstica, a compartir su testimonio sobre su misión. Estas mujeres se encuentran en una situación sumamente difícil que se ha visto agravada por la pandemia ya que viven dentro de los muros del Refugio y no pueden salir a trabajar. Además, después de alcanzar el número máximo de 2 años de permanencia en el Refugio, deben buscar un lugar y mantenerse por sí misma. Uno de ellas, una madre con su bebé, se encontraba en esta situación.

Esta madre y su bebé debían salir del Refugio pero las Hermanas, al ver que no tenían medios económicos, facilitaron el proceso para que fueran destinatarios de la primera de las 13 Casas. ¡Las Hermanas dieron un paso más y le ayudaron a encontrar un trabajo! Ahora trabaja mientras el bebé está en una guardería. Ella cubre los gastos de manutención como comida, agua, electricidad, tarifa de teléfono, etc.; las Hermanas la ayudaron también a obtener un subsidio del gobierno para los gastos de la guardería. Hoy podemos decir que es “consciente de su propia dignidad y agente de promoción de su propia vida” (cf. C.24e). ¡Gracias a DIOS y gracias a nuestra Familia Vicenciana!